Diversión carnavalesca en Goa

Tras 2 meses sin la fiesta mensual dominical por excelencia de Madrid, Goa Carnaval 2011 será recordada por el buen ambiente y la lección magistral de John Digweed con un set de 4 horas para enmarcar

Días de frío y nieve en Madrid. Todos esperando a que el tiempo diera un respiro por carnavales. Y así ocurrió el último día de la semana. La gente que tenía pensado ir a la Goa se topó con un día soleado y con unas temperaturas amables para festejar la jornada con los disfraces de rigor. Era un día para pasárselo bien y la muchachada respondió con un ambiente espectacular ya desde primeras horas en el parking.

En cuanto al cartel lo más destacable y llamativo eran tres nombres: John Digweed en la sala principal iba a marcarse un set de 4 horas de duración, y los alemanes Solomun y Phonique en la Crystal room. El resto del cartel lo completaría gente de la talla de Luis Groove, Javier Carballo, Igor Marijuan o Henry Martínez, entre otros. Y siempre presentes los residentes: Gerardo Niva y Marcos In Dub.

Cartel

Por aquí se ha hablado de otras ediciones de Goa y la última a la que se asistió no dejó un buen sabor de boca. De estas fiestas hay tres fechas claves donde la afluencia de publico supera la media de asistencia habitual: Una es la de cierre de temporada en Verano, otra es Halloween y la última es Carnavales. Viendo los precedentes podríamos esperar un Halloween versión 2.0, pero para alegría del personal fue todo lo contrario. Había un ambientazo y mucha público, pero ni por asomo se respiraba un aroma de masificación. De hecho, el parking principal fue cerrado más tarde de lo habitual y por dentro del recinto podías moverte con facilidad y sin problemas. No sé si se vendieron menos entradas de lo habitual o se ha puesto coto al aforo, en todo caso, así sí que da gusto salir un domingo a disfrutar y pasar una jornada agradable y divertida.

Diversión. Esa es la palabra clave de esta Goa de carnaval. Lo de los disfraces y la imaginación de la gente es caso a parte. Algunos cutre-salchicheros (ir con una peluca o una mascará no es ir disfrazado) pero otros, la gran mayoría, eran de nota. La temática de la fiesta era el Manga y alguno optó por esa vía. Mención a parte a dos chicos con unos kimonos de Goku clavados a los de la serie. Había de todo tipo de disfraces: romanos, orientales, caperucitas, catwomans, payasos, distintos rangos eclesiásticos (de sacerdotes a Papas pasando por monjas y frailes) y divinos (algún Jesucristo con cruz incorporada), luchadores de sumo, Barbies y Action Man en sus embalajes, Benders, Frodo Bolsón, equipos femeninos de fútbol, hadas, médicos, espantapájaros, el sombrerero loco, blancanieves, mecánicas, vacas, una máscara de Deadmau5, Hulk Hogan, militares, bomberas, policías, un tio disfrazado de pene, la sota de oros, marineros/as, faraones, reos, Jokers, Pippi Langsturm, Hulk, Peter Pan, mafioso, Marios y Luigis, Hippies, disfraces inclasificables etc etc. Con un ambiente así es difícil pasarlo mal. Por lo menos en el Parking, dentro todavía era un incógnita.

"Main room"

Al acceder a Fabrik, en torno a las 5 y media de la tarde, no había cola ninguna. La pista principal estaba al 50% de su capacidad. Un breve paso por la crystal room y descubrimos que la zona Satelite estaba abierta. A esas horas la segunda área con más capacidad del recinto de Moraleja de Enmedio estaba prácticamente desierta. A los platos Gonçalo estaba repartiendo groove por los cuatro costados. Música muy bailable y perfecta para calentar el ambiente. Un apunte que no hay que dejar pasar por alto es que han habilitado dos túneles, uno de acceso y otro de salida. Todo un acierto.

De ahí, a ver y a bailar a Solomun en la crystal room. Menudo deep house más bueno se gastó el alemán. Del sinuoso del que entra pausado por todo el cuerpo pero que incita a moverte al compás que marcan los beats. Quedaba una zona por visitar. Y esa era la Upper floor y Luis Groove fue la sorpresa de la noche. Menuda música propia de su apellido artístico. Imprimió una energía a su set que hizo que todo el mundo no parara de bailar en la zona donde la gente estaba un poco más apretujada. Pero todos felices y contentos de contonearse al ritmo que dictaba el chicharrero. Y es que el producto nacional tiene calidad y a veces nos cuesta reconocérsela.

Era el momento de ver al pez gordo de la noche. A las 9 y de forma puntual John Digweed arrancaba su set de 4 horas. Quien tuvo retuvo y el jefe de Bedrock hizo una evolución y progresión digna de un maestro artesano. Empezó calmado, cosa que minó a quien esperaba algo más movido, pero poco a poco iba retomando el vuelo a sonidos con influjos más techneros. Progressive-house de alta escuela que hizo disfrutar al público de lo lindo sobre todo a partir de la mitad del set. Momento donde embaucó a toda la sala. Y sin necesidad de megatrón.

"Solomun y Digweed en acción"

En resumen fue una buena y divertidísima Goa y están son las crónicas que un servidor prefiere hacer de esta fiesta. Sigan así.

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Fotos: Electronica & Roll
Video: Electrónica & Roll