Estado de locura en CODE 075

Aphex Twin y su show audiovisual esquizo triunfó en el lluvioso 8º Aniversario de Code. Surgeon destacó antes y Varela y Bailey ofrecieron un techno que parece ya olvidado

Significado de locura (de loco): Privación del juicio o del uso de la razón. Acción inconsiderada o desacierto. Acción que, por su carácter anómalo, causa sorpresa. Exaltación del ánimo o de los ánimos, producida por algún afecto u otro incentivo. Todas y cada una de estas descripciones se dieron en la noche del 19 de noviembre en la sala Fabrik. Vayamos desgranando los por qués.


La privación del juicio y uso de razón podría aplicarse a unos cuantos miles de jóvenes (y no tanto) que en la noche de la jornada de reflexión electoral y bajo una incesante lluvia (en algunos momentos parecía el diluvio universal) deciden ir al extrarradio madrileño para pasar una noche de música techno. Y es que pasión y razón no suelen ir de la mano. Como es menester, el botellón de rigor no puede faltar. Algunos por las inclemencias meteorológicas decidían entrar rápido, otros bebían dentro de sus vehículos. Los más ingeniosos montaban improvisados chiringuitos en una unión caricaturesca de paraguas y maleteros abiertos. Y los más valientes bebían bajo el manto del agua. Estos últimos a estas horas estarán desarrollando una pulmonía. Las cosas que se hacen por unos copazos a precio razonable a veces es de locos.

Más temprano que tarde, la incomodidad del tiempo hizo que la gente accediera lo más rápido posible. Y en esas, en la main room se encontraba el señor Tony Child más conocido por todos como Surgeon. El de Birmingham, ha publicado este año “Breaking the frame” (uno de esos discos de techno cerebral), ofrecía un live donde sacó su bisturí para diseccionar un techno oscuro, cuidado y potente. El oficio del cirujano pocas veces defrauda y cada vez recrudecía más el ambiente haciendo gala de una sutilidad digital artesanal. Un concepto de locura, un adjetivo que viene al dedo porque fue extraordinario.

"Operación! Métele un bombo y quita el subidón! Operación!"

El que suscribe se quedó sorprendido por la cantidad de gente que preguntaba a qué hora empezaba y dónde actuaba Óscar Mulero. No voy a discutir la figura del madrileño, que tan entredicho está en la actualidad, pero su legión de fans que arrastra su leyenda me chocó de sobremanera cuando explicaba que iba después de Aphex Twin. Su siguiente pregunta era "¿y qué música pincha ese?" En un vano intento de explicar y recomendar lo que hace el irlandés a todo aquel que me preguntaba parecía que hablaba en chino por las caras de mis interlocutores. Estoy convencido que todo aquel que no tenía ni el más mínimo conocimiento del personaje APHX son los mismos desacertados e inconsiderados que les da por gritar el "Seven Nation Army" en cada silencio musical entre actuaciones o al final. El axioma público garrulo y LO-LO-LO-LO-LO es inexorable. Y es que: Jhonny! la gente está muy loca!

Y ahora vamos a centrarnos en lo que hizo Aphex Twin. La figura del personaje que ha creado Richard D. James es un tótem de vanguardismo, genialidad y esquizofrenia sonora. Un hombre capaz de crear himnos ambient, hits undergrounds que pueden llegar a la Mtv, techno brutal y sin concesiones, drum & bass pesadillesco y frenético o sonidos tan abstractos que la gente de a pie solo es capaz de escuchar ruido . Y luego están sus actuaciones en directo donde todo eso se combina en un coktail con unas visuales bañadas en LSD. Un principio lento y cargado de breaks que hizo que muchas personas se fueran a otras salas a los 15 minutos de actuación. Un nudo en un increscendo donde la fórmula no era sumar sino multiplicar. Y un cierre donde la finalidad era aniquilar todo sentido común. Los que conocemos del pie que cojea este señor nos quedábamos hipnotizados y disfrutábamos del viaje tocando el Nirvana. Los que no le conocían estaban en una hipnosis dominada por el desconcierto. A más de uno se le derretiría la neurona. Mención aparte merece el trabajado espectáculo visual con tres momentos a destacar: esa rubia del público que enseñó sus pechotes a toda la sala (Minuto 4:49 del primer video), el SUBLIME y provocador instante donde nos dio un repaso a los españoles (Verano azul, Rajoy, Rubalcaba, la Familia Real, ETA, Franco, el 15-M, el 11 inicial del Atleti y del Madrid, Los Fruitis etc etc… y todos los rostros sustituidos por una combinación de caras del propio James y del público asistente. Para quitarse el sombrero) y el cierre con el mensaje simple y directo donde deja patente que “odia a su público”. La tercera acepción de locura encaja perfectamente en este párrafo.

"Suaves preliminares, tetas espontáneas y pasamos a lo duro"

"¡¡Aniquila APHX! ¡Aniquila!!"

"Y para terminar: ¡Iros todos a tomar por culo!"

Una vez finalizado el set de APHX se apagaron las luces con la consiguiente ovación. Se puso a los mandos Mulero y llegó el instante de ir a otros lugares de Fabrik. Y con la lluvia siempre presente directamente fuimos a una sala Satelite perdiéndome la zona de las actuaciones de la RBMA. Me quedé con las ganas pero ir al segundo espacio más grande de Fabrik con un gran aforo disfrutando del remember set technero que se iban a gastar Cristián Varela y Marco Bailey en modo versus no fue un error. Al principio estaba solo Varela y puso un techno que nos hizo retrotraernos una década. Mucho movimiento y rapidez, de 135 bpms para arriba. Todo “Made in Varela”, dinamismo, diversión, contundencia y una técnica al alcance de muy pocos. Marco Bailey continuó en esa línea y cuando se supone que a las 6:30 iban a cerrar, este momento se alargó una media hora más con los dos artistas turnándose en la mezcla. Ese afecto hacia tiempos pasados exaltaron los ánimos de los más veteranos, y la locura siguió hasta el final de la noche.

"Old techno times today"

Ya con las luces encendidas y los dos dj´s repartiendo vinilos era el momento de irse a casa. La lluvia dio un mínimo respiro para todos los mentalmente divergentes que allí nos reunimos para volver de nuestro manicomio particular a nuestras casas.
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Fotos y Videos: Electrónica & Roll

Comentarios

Pablo S ha dicho que…
Maldito loco irlandés. Qué grande ese final. Visto el cántico de algún soberano imbécil, es lógico que odie a su público.
Diego M. ha dicho que…
La mitad de gente que fue no sabia a a quien estaba viendo, de todas maneras dicen que no esta hecha la miel para la boca del burro... y pensar que me quede sin ir por una tonteria...
Sergio Bifeis ha dicho que…
La mitad o más de la mitad, se podía haber puesto Aphex Twin o perico el de los palotes como cabeza de cartel... esa fue mi sensación.

De las 8.000 personas que fueron a Fabrik ese fin de semana estoy convencido que solo un 20% sabía perfectamente qué iba a escuchar y qué se iba a encontrar (tirando por lo alto). Y es que somos culturalmente muy catetos que en el ámbito de música electrónica. Cuando se va a un concierto se paga una pasta y como mínimo conoces al grupo principal y alguna canción de ellos (a veces hasta puedes conocer a los teloneros).

Esta CODE valía la entrada anticipada 28 Euros y a mucha gente les decías Aphex Twin y se encogían de hombros.
Diego M. ha dicho que…
Ya pero es la moda y mis amigos no iban a ver a Aphex Twin o incluso a Mulero o a Varela, van a la CODE o a la GOA y van por que va Vicente... igualmente ya estan comprando las entradas para la proxima y tampoco conocen al señor Garnier... eso ejemplo se puede extrapolar al 80% de las personas que van a la Fabrik